Harto de carencias.

¿Tenerlo todo y no poder disfrutar nada?

¿Poder hacer cosas que otros no pueden y hacerlas casi nunca o nunca?

¿Tener ganas de algo, constantemente y no poder saciarlo?

Vida injusta, no creo que sea tan avaricioso, luché por tenerla todo el tiempo del mundo, apoyándola incluso ayudándole a escapar de cadenas que dejan huella en su costado.
Querer es poder, en este caso quiero y no me dejan poder hacerlo.
Quiero pasar cada minuto de mi vida respirando el vainilla que dejas mover esas pequeñas piernas de un lado de la casa al otro con ese nerviosismo que llevas siempre.
Necesito poder besarte, y si me apetece seguir hasta lo más oscuro cuando quiera y cuando me apetezca, siempre huyo y pretendo conseguir libertad, pero me topo con una gran puerta llena de barrotes que solo me dejan tocarla un poco y no entera, tal vez en poco tiempo.
Destruir esa puerta, un gran sueño.
Destruir esa puerta, será mi reto.