sábado, 2 de agosto de 2014
Volver a nacer
He tenido una extraña sensación. Como de calor y frío al mismo tiempo. Como si todas las luces estuvieran apagadas y a la vez encendidas.
Estoy seguro de que esa es la sensación que tenemos al nacer.
Porque cuando la tuve, no encontraba recuerdo alguno y lo único que sentía, era aturdimiento.
Al menos notaba una gran fuerza al cabo de unos segundos, de un rostro difuminado, sexy pero borroso. Que me apretaba bien la mano y me hacía sentir seguro.
Una sombra que es capaz de hacerte olvidar que estás aturdido.
Un reflejo que inunda toda tu memoria y no hace falta recordar nada.
Creo que han sido los mejores 5 minutos del día o puede que los peores. Pero al menos en esos 5 minutos. Me concentraba en ella y ella en mi, olvidando todo lo que sufrí y todo lo que fui.
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